¿Dónde ir, este día que teníamos en Pompeya? Decidimos conocer Sorrento, así que nos tomamos un tren, más lleno y en peores condiciones que un Roca pre Milei, y allí fuimos. La ciudad es preciosa, pequeña, pero para mí gusto, demasiado del estilo decorado, y muy privatizada. Las playas, pequeñitas, así que lo que hicimos fue caminar y caminar, subir y bajar, y darnos un gusto: comer pescaditos y birra bien fría a orillas del mar, y después un helado viendo fútbol. De vuelta a casa, después de un largo viaje, el mate reparador en el patiecito con olor a albahaca y árboles frutales.
Sorrento en todo su esplendor
El Vesubio
Una exposición sobre Sofía Loren, la más bella
Unas flores bellísimas
Aquí comimos, en una cooperativa de pescadores
Sorrento, hermana de Mar del Plata, no lo sabía!
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